Hola a todos. Os cuento dónde tengo mis ninfas de Gemmatus por si queréis tomar alguna idea para vosotros (y de paso, el que tenga otras formas de tener a sus ninfas que nos lo cuente).
Conseguí una ooteca de Creobroter Gemmatus. Como ya sabéis, en unas semanas tenía unas 30 preciosas ninfas y tenía también, al menos, dos problemas:
¿Cómo ubicar de manera controlada 30 mantis pequeñas como hormigas?
¿Cómo transportarlas cuando me iba a Valladolid por unos días?
Para ubicarlas, tenían que ser recipientes pequeños para que encontrasen bien el alimento (la primera ninfa que se alimentó estaba en un bote de carreta para fotos).
Tenía que ser barato porque en cada recipiente tendría que vivir una ninfa o dos en sus primeros estadios (unos 20 recipientes).
Tenía que ser fácil de abrir y cerrar para poder darles el alimento sin que se escapasen las moscas ni las mantis y para no apachurrarlas.
Tenían que ser transparentes para poder observarlas y tenía que tener una parte con ventilación por razones obvias.
La idea no la he sacado de internet y seguro que hay formas mejores para ubicar un montón de mantis en sus primeros estadios...pero esto es lo que he hecho.
Compré vasos pequeños de plástico transparente en los chinos. Son 50 vasos de chupito que valen 0’75 céntimos. En la misma tienda compré dos pares de medias de señora de malla muy fina (no quería usar malla mosquitera porque las moscas de la fruta se escapan).
En casa tenía un cúter, unas tijeras afiladas y cola de carpintero que uso para hacer los terrarios para fásmidos y empecé la faena:
Corté 20 vasos de chupito a la mitad. Primero hice un corte con el cúter y después termine la circunferencia con la tijera y con paciencia para que los vasos no se rajasen.
Con más paciencia fui pegando con la cola la malla de las medias a la parte superior de los vasos. Un hilo fino de cola sobre la boca del vaso, coloco la tela estirándola un poco, espero unos segundos, corto la tela y paso a por otro. Cuando se coge práctica se va muy rápido. Si metes una caja en la media, la media se estira y puedes pegar los vasos de seis en seis, esperar a que se seque bien y cortar.
Pones la mitad del vaso con la malla sobre un vaso nuevo y ya tenemos un terrario para una mantis, o dos si son pequeñas.
Los culos de los vasos que me sobraron los aproveché para solucionar el segundo problema y porque aquí no se tira nada, como en la cocina de Arguiñano. El segundo problema que tenía que resolver era cómo transportar con facilidad los 20 vasos de chupito con las 30 mantis.
Cogí un viejo terrario para fásmidos que ya no usaba y que, por supuesto, había fabricado yo mismo con listones de madera y metacrilato del Mevoy a Berlín (ya he hecho citado a los chinos y no voy a hacer más publicidad).
Seguimos; tumbé el terrario que tiene todas las partes de metacrilato transparente excepto la puerta que tiene malla mosquitera y queda en la parte de arriba, como si fuese un baúl. Cogí los 20 culos de vaso que me sobraron y los pegué al fondo en 7 filas de 3. Así, puedo meter y cacar cada vaso con su mantis en cada culo de vaso pegado y quedan todos sujetos; el terrario transporta los 20 vasos de una vez y, además, todos están sujetos y no se caen haciendo un desastroso efecto dominó.
Los “vasos cortados” con muy útiles también para el alimento vivo. Cultivo pequeñas colonias de moscas de la fruta en esos vasos de chupito y, a la hora de pasarlas a los 20 vasos de chupito de las mantis, lo que hago es pasar la tapa del cultivo de moscas (que se sulen quedar en la malla de arriba) al vaso de las mantis (que también se suelen quedar arriba). Doy un par de toques con el dedo y caen 3 ó 4 moscas, cambio las tapas y listo.
También uso estos vasos para las moscas grandes que doy a las Phyllocrania.
Compro un tarro de asticot en la tienda de deportes ésta, el Delatón. La meto en le frigo para que no pupen, cojo unos 20 gusanos y los meto en un vaso con tapa de malla y un poco de fibra de coco. Bueno, realmente esto lo hago en tres vasos. Uno lo dejo en la terraza exterior, otro en un armario y otro dentro del terrario de las tarántulas que está a 27-28 grados. Así intento escalonar el desarrollo de las moscas. Cuando eclosionan las meto un trozo de papel de cocina con agua y miel. Cuando tengo que dar de comer a las Phyllocrania, cojo el medio vaso con malla que hace de tapa (que, otra vez, es donde se suelen quedar las 20 moscas) y doy un toque con el dedo dentro del terrario de las mantis.
Conclusión, los vasos son realmente económicos. Lo que hace falta es un poco de tiempo y paciencia. Pero lo que estoy descubriendo en este mundillo es que, a parte de lo que podemos disfrutar viendo cazar, mudar y criar a nuestros insectos, es que también podemos disfrutar haciendo terrarios. Y también haciendo fotos y enseñándoselas a los compis del foro.
Un saludo.