Veo que ya los tienes bien acomodados jejeje. La dificultad de esta especie en mi opinión radica en las larguisimas incubaciones (como poco 1 año de incubación), en las que muchas cosas pueden salir mal y por un despiste de unos días pueden irse al carajo. Las ninfas recién nacidas son algo delicadas pero en cuanto han hecho una o dos mudas ya son bastante resistentes.
Otra cosa a tener en cuenta es que los imagos son bastante grandes y pesados (las hembras especialmente, que he llegado a tener algunas de 15 cm de longitud y el abdomen de 4-5 cm de ancho), por lo que conviene tener un terrario bien grande para ellos solos.
Mucho cuidado también al manipularlos, porque tienen genio y muchas espinas afiladas, así que cuando los molestes un poco lo normal es que se pongan agresivos e intenten clavártelas si les acercas la mano.
También comen bastante en comparación con la mayoría de especies, por lo que es imprescindible tener abundancia de alimento durante todo el año, aunque bueno, esto depende también del número de bocas que haya que alimentar.
Suerte con ellos
Un abrazo